esa es la sensación que dejan las imágenes de Chaitén y lo que me llama la atención tanto en los noticieros de TV como en los diarios, el paisaje se convirtio en una foto en blanco y negro intervenida en la que se dejó intencionalmente uno que otro color.
La erupción del volcán que ha estado por más de 400 años sin actividad, ocasionará daños irreparables al ecosistema. El domo no tiene apertura superior por lo que emanan de él cenizas, lo que también significa que la lava está contenida en su interior, aun cuando por no tener una cubierta de hielo no habrán deslaves, según los expertos del Sernageomin.
Las informaciones hablan de una nube de 14 km. de altura sobre Chaitén, la que se ha desplazado por sobre la cordillera de los Andes hacia territorio argentino convirtiendo también a Chubut en una ciudad en blanco y negro. La imagen de la nube también tiene un componente estético y me hace recordar esas imágenes del Pichincha, cuando en Quito se instalaban esos hongos de ceniza de 10 km de altura que luego se desplazaban por el viento. Las fotos del hongo pasaron a ser una de las principales ventas, de esos días, de los comerciantes ambulantes.
La ceniza destruye, sin duda; las plantas y los animales que quedan en la zona se verán afectados; a los habitantes los están trasladando a Chiloé, a Puerto Montt con todo lo que para ellos significa abandonar sus casas y tierras.
Y ahí está, la naturaleza implacable con esa fuerza que brota de sus entrañas, con ese fuego contenido que no sale, que no se asoma, que no da el espectáculo de rojo encendido, de chispas y llamas que dan otros volcanes.
Las informaciones hablan de una nube de 14 km. de altura sobre Chaitén, la que se ha desplazado por sobre la cordillera de los Andes hacia territorio argentino convirtiendo también a Chubut en una ciudad en blanco y negro. La imagen de la nube también tiene un componente estético y me hace recordar esas imágenes del Pichincha, cuando en Quito se instalaban esos hongos de ceniza de 10 km de altura que luego se desplazaban por el viento. Las fotos del hongo pasaron a ser una de las principales ventas, de esos días, de los comerciantes ambulantes.
La ceniza destruye, sin duda; las plantas y los animales que quedan en la zona se verán afectados; a los habitantes los están trasladando a Chiloé, a Puerto Montt con todo lo que para ellos significa abandonar sus casas y tierras.
Y ahí está, la naturaleza implacable con esa fuerza que brota de sus entrañas, con ese fuego contenido que no sale, que no se asoma, que no da el espectáculo de rojo encendido, de chispas y llamas que dan otros volcanes.
2 comentarios:
Te leí y no pude evitar saltar para decir... "Yo estube allí". El Guagua Pichincha se manfestaría en cualquier momento y la alerta variaba de amarillo a naranja. Jorge López y el resto de la compañía esperaba que hiciera su espectacular brabata, pero n ocurrio, no con nosotros en Quito. Nuestro itinerario nos llevo a Colombia y mientras estabamos allí, el Pichincha se mando su pirotecnico y ceniciento ejercicio. Cuando volvimos por esos pagos, solo quedaban exhues muestras de ceniza, pero gracias a la mentalidad comercial de un sin numero de gentes, el espectaculo estaba totalmente graficado... Por eos te puedo de cir, "Yo casi etube allí"
Juan
Te quedó muy buena la nota. Que difícil decir algo distinto cuando la erupción informativa te llena todo, y lo lograste.
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